Su práctica cotidiana y el aprendizaje en el aula.
Desde diversos contextos, la alfabetización ha jugado diferentes papeles, los políticos, planificadores y administradores de la educación, han dedicado a este aspecto cuestiones que van desde introducir al mundo de la lectura y la escritura a la población de determinado lugar, hasta de digitalizar a alumnos de educación formal.
La lectura nos muestra en un contexto histórico general, la importancia y enfoque que se le ha dado a la alfabetización, mostrando en ello las relaciones sociales, institucionales y culturales que cada país dedica a este aspecto. El solo hecho de aprender-enseñar a leer y escribir significaba alfabetizar; el solo hecho de ser analfabeto significaba ser pobre o tener un status marginado; sin embargo, hoy en día las personas leen y escriben (por ejemplo en el Chat) de forma diferente, y éstas son de acuerdo con sus distintas prácticas sociales y distintas formas y facetas de hacer la vida.
También la lectura nos muestra los enfoques de algunos teóricos como Gee, él cual define un alfabetismo fuerte como el uso de un lenguaje secundario, un “metalenguaje” para comprender, analizar y criticar otros discursos (“formas de estar en el mundo” que integran palabras, actos, gestos, actitudes, creencias, fines, ropas, movimientos y posturas corporales, etc) y su forma de constituirlos como personas y situarnos en sociedad.
En la actualidad, se piensa que cualquier saber y casi cualquier aprendizaje, desde el punto de vista educativo, pueden concebirse de un modo u otro, como alfabetismo. Esto también nos lleva a conceptos que van relacionados a una alfabetización en informática o en tecnología, ya que las personas que tengan capacidad de ejecutar algo o tener destreza en este rubro se les puede llamar alfabetizados.
Dentro de los alfabetismos más populares y actuales está el alfabetismo digital, que Gilster lo define como “la capacidad de comprender y utilizar la información en múltiples formatos de una amplia diversidad de fuentes cuando se presenta a través de ordenadores” y en especial a través de Internet.
Se piensa que este tipo de alfabetismo puede crear ciertas desigualdades sociales y económicas ya que los que no están alfabetizados digitalmente están en desventaja con los que si lo están, sin embargo los que promueven este tipo de alfabetización suponen que se pueden transmitir las competencias el, y conocimientos necesarios a todas las personas implicadas en la educación, a los trabajadores y todos los que quieran alfabetizarse de esta manera.
Después de lo anterior, me queda claro que el término “alfabetismo” tiene diferentes connotaciones, esto es por los diferentes contextos y los diferentes momentos históricos por los que ha pasado, lo importante de ello, es que en cada momento estemos alfabetizados de la manera en que lo requiera la sociedad.
Lankshear, Colin y Knobel Michele. Nuevos alfabetismo. Su práctica cotidiana y el aprendizaje en el aula. Ediciones Morata
Desde diversos contextos, la alfabetización ha jugado diferentes papeles, los políticos, planificadores y administradores de la educación, han dedicado a este aspecto cuestiones que van desde introducir al mundo de la lectura y la escritura a la población de determinado lugar, hasta de digitalizar a alumnos de educación formal.
La lectura nos muestra en un contexto histórico general, la importancia y enfoque que se le ha dado a la alfabetización, mostrando en ello las relaciones sociales, institucionales y culturales que cada país dedica a este aspecto. El solo hecho de aprender-enseñar a leer y escribir significaba alfabetizar; el solo hecho de ser analfabeto significaba ser pobre o tener un status marginado; sin embargo, hoy en día las personas leen y escriben (por ejemplo en el Chat) de forma diferente, y éstas son de acuerdo con sus distintas prácticas sociales y distintas formas y facetas de hacer la vida.
También la lectura nos muestra los enfoques de algunos teóricos como Gee, él cual define un alfabetismo fuerte como el uso de un lenguaje secundario, un “metalenguaje” para comprender, analizar y criticar otros discursos (“formas de estar en el mundo” que integran palabras, actos, gestos, actitudes, creencias, fines, ropas, movimientos y posturas corporales, etc) y su forma de constituirlos como personas y situarnos en sociedad.
En la actualidad, se piensa que cualquier saber y casi cualquier aprendizaje, desde el punto de vista educativo, pueden concebirse de un modo u otro, como alfabetismo. Esto también nos lleva a conceptos que van relacionados a una alfabetización en informática o en tecnología, ya que las personas que tengan capacidad de ejecutar algo o tener destreza en este rubro se les puede llamar alfabetizados.
Dentro de los alfabetismos más populares y actuales está el alfabetismo digital, que Gilster lo define como “la capacidad de comprender y utilizar la información en múltiples formatos de una amplia diversidad de fuentes cuando se presenta a través de ordenadores” y en especial a través de Internet.
Se piensa que este tipo de alfabetismo puede crear ciertas desigualdades sociales y económicas ya que los que no están alfabetizados digitalmente están en desventaja con los que si lo están, sin embargo los que promueven este tipo de alfabetización suponen que se pueden transmitir las competencias el, y conocimientos necesarios a todas las personas implicadas en la educación, a los trabajadores y todos los que quieran alfabetizarse de esta manera.
Después de lo anterior, me queda claro que el término “alfabetismo” tiene diferentes connotaciones, esto es por los diferentes contextos y los diferentes momentos históricos por los que ha pasado, lo importante de ello, es que en cada momento estemos alfabetizados de la manera en que lo requiera la sociedad.
Lankshear, Colin y Knobel Michele. Nuevos alfabetismo. Su práctica cotidiana y el aprendizaje en el aula. Ediciones Morata
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